Un altar sagrado y contemporáneo, donde los objetos encontrados han sido hackeados y se muestran con esencia de gabinete de curiosidades.

 

Objetos que invitan y nos sumergen en un mundo de fantasía, seducción y reflexión sobre las nuevas formas de entender los mitos, el poder, el feminismo y la masculinidad, lo sagrado y lo icónico, un juego abierto al espectador.

 

La muestra conjunta realizada por los artistas “No queda tinte” Marina Salazar y “El dios de los tres” Javi Navarro, tiene carácter de instalación “work in progress”.

 

La reutilización de elementos encontrados en Palo Alto y de los materiales cedidos de la creación de arquitecturas efímeras, hacen que el espacio pueda ir sumando nuevas piezas, nuevas creaciones, durante las semanas que durará la exposición, generando un laboratorio creativo vivo.

 

“Enfrentamos, hibridamos, enlazamos, yuxtaponemos y conectamos a través del deseo, sus particulares cosmogonías en diferentes formatos: escultura, fotografía e ilustración, bajo una concepción del espacio performativo, utópico y paradisiaco”.